Existen miles de consejos sobre cómo ganar, pero seguro que ha oído pocos a cerca de cómo perder y saber sobrellevarlo. No importa lo bien que conozca el juego y sus reglas, ni las buenísimas estrategias que tenga, al final siempre existe alguna ocasión en la que su suerte sufrirá un revés. Cuando ese día llegue seguramente sentirá una mezcla de enfado y frustración y comenzará casi sin darse cuenta a apostar más alto y a jugar sin razonar para librarse cuanto antes de ese sentimiento de derrota. Al final esto siempre desemboca en lo mismo, más frustración. Algunos tienen la idea equivocada de que esta mezcla de sentimientos se da solo al jugar en los casinos y no al jugar online, pero tan solo hay que preguntar a los jugadores de la red. Ellos afirmarán que es tan común sentir esa frustración jugando en los casinos como en las páginas web.

Casi ningún jugador es capaz de controlar esta mezcla de sentimientos una vez les llega, así que lo mejor es aprender a reconocer sus síntomas y dejar el juego o incluso abandonar la sala cuando esto ocurre. No nos engañemos pensando que lo mejor es quedarse a recuperar el dinero; en realidad esto es lo peor que podemos hacer, pues nuestras habilidades para jugar y pensar no están en su punto más álgido. No hay ningún consejo ni existe ninguna estrategia infalible que puedan hacernos superar el bloqueo mental que sufrimos en ese momento.

La mejor forma de prevenir esta frustración es reconocerla y estar preparados para lo peor. Si tenemos un mal golpe de suerte o perdemos un gran bote, es natural sentir rabia, pero hay que olvidarlo; pues si jugamos con la impresión de que las cartas se han puesto en nuestra contra, no podremos librarnos del enfado y empezaremos a pensar de forma irracional. Lo mejor en esos momentos es dejar de jugar, tanto si estamos en un casino como si estamos jugando online, aunque en este último caso puede que resulte un poco más difícil.

En ocasiones, un simple descanso basta para que se pase el malhumor. Cierre sesión en la página web, levántese y de un paseo. Salga de casa, quede con un amigo y tome algo de cafeína- cualquier cosa que le ayude a olvidar la mala pasada- .Cuando se haya calmado, lo sabrá, y en ese momento decidirá si desea volver al juego o si prefiere dejarlo para otra ocasión.